Lluvia. Mi mayor miedo conociendo ese poco-amigable clima inglés establecido en las islas británicas, puesto que a un servidor no le hacía mucha gracia un festival pasado por agua. Pero esta vez la suerte estaba de mi lado y del de los miles de asistentes al festival y el sábado 24 de julio a las 12:00 en las puertas de Victoria Park un tórrido sol (tórrido para aquellos lares, estaríamos a 28 grados, más o menos) caía sobre las testas de los que ansiosamente esperábamos que abriesen la entrada.
Con darse una vuelta por el recinto uno se daba cuenta de la clase del festival y de que la organización no era de pacotilla ni mucho menos. 2 tiendas de merchandising, más de 10 puestos de comida todos con alimentos distintos a la venta donde se pagaba en efectivo sin tener que sacar esos odiosos tickets ni tener que hacer una horrible cola para devorar una mísera hamburguesa, muchos, y cuando digo muchos es MUCHOS lavabos portátiles (tantos como más de una treintena de ellos en cada zona de "evacuación") así como unos estupendos urinales al aire libre sin complejo ninguno.
Motivos funcionales a parte, primero ví el show de los hard rockeros The Union en el Classic Rock stage (incluso se atrevieron con una versión del "Proud Mary" de Creedence Clearwater Revival), pero el primer show fuerte lo encontrábamos en el Progressive Stage (una bonita carpa de circo lila) con los grandes Focus, que recientemente prestaron su super hit "Hocus Pocus" para la campaña de presentación del mundial de Suráfrica ahora ya terminado. Estos dinosaurios del rock ofrecieron un genial show con varios puntos álgidos como la canción antes mencionada, un genial solo de flauta a mitad de concierto, "Sylvia" o la siempre magnífica "Answers? Questions! Questions? Answers!".
Una vez finalizado el concierto de los holandeses, regresé al escenario principal para presenciar el show de los rockeros The Answer, que tras darse a conocer mundialmente como aquellos fantásticos teloneros de AC/DC, ya hace un tiempo que se conviertieron en algo más que eso y cosecharon una gran base de fans que allí estaba para apoyarlos. No llegué a ver el final porque no quería perderme "The Evils Of Rock & Roll", ese gran tema que Bigelf tocan siempre al principio de sus conciertos. No fue para menos, pues estos proggies son la viva imagen de la música de hace 30 años atrás, combinando gloriosamente Pink Floyd y Black Sabbath entre otras influencias. Con el siempre brillante Damon Fox increíblemente tocando a la vez dos teclados y cantando, el conjunto interpretó 7 de sus éxitos, a destacar la antes mencionada, "Blackball", "Hydra" y "Neuropsychopatic Eye".
Tuve que salir pitando antes de que terminase el show de los suecos perdiéndome el himno "Hearts On Fire" para llegar al principio de lo que sería un genial show del ahora rechoncho Gary Moore, se nota que al hombre le va la buena vida. Lo mejor es que esta buena vida no ha influido en su manera de tocar, ni en la energía que le ponía a la Les Paul con temas emocionantes a lo "Thunder Rising" y la primera "Over The Hills And Far Away".
Como anécdota del show, contaros que al señorito Moore se le pasó eso de mirar qué hora era y cuando iba a tocar la última canción (probablemente iba a ser "Still Got The Blues" o "Parisienne Walkways"), los responsables del festival salieron a decirle que se le había acabado el tiempo y que debía abandonar el escenario. Gary, indignado, intentó negociar con los responsables, pero todo intento fue en vano ante los rígidos miembros de la organización.
No me moví demasiado del Hammer stage porque los siguientes en tocar eran los legendarios Saxon, de los cuales no me quería perder detalle. Si bien antes he comentado que al show de HammerFall le faltó participación del público, de esto Biff y los suyos no carecieron, ya que la audiencia se conocía cada uno de los temas, y no era para menos porque cayeron canciones tan legendarias como "747 (Strangers in the Night)", "Denim and Leather", "To Hell And Back Again" o "Crusader", para acabar con la veloz "20.000 Feet"
Tras varios excelentes temas, sorprendentemente Wendy Dio subió al escenario para leer un discurso, lástima que estuviese tan apartada del micro que casi no se la oyó. Tras esto, Jorn y Glenn unieron fuerzas con el resto de los H&H para fulminarnos con "Heaven and Hell" y un glorioso bis interpretando "Neon Knights" con Phil Anselmo también.
Si algo le faltó a este último concierto del sábado fue potencia, porque los tejanos sonaron algo débiles a ratos, pero se les perdona por ser quienes son. No falto eso sí, el buen humor de Billy Gibbons y su tono bromista, sobretodo cuando sacó a una niña pequeña al escenario ante decenas de miles de personas para que se tocase un solo con él en el traste y ella dándole a las cuerdas, simplemente adorable.
1 comentarios:
queeee pasada de dia xddd espero la cronica siguienteee... un saludo, keep progginn'!!!!
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